Los modestos albiverdes baten a los campeones rojiazules
Data: 29/06/1926
Font: El diluvio
Autor: R. G. C.
Text:
PREMIO AL ENTUSIASMO
Los modestos albiverdes baten a los campeones rojiazules
La pupila de Samitier :: A matadegüella :: El árnica por las nubes Gran exhibición del sustituto de Zamora :: El fracaso de los rematadores :: La desaparición de Walter y la reaparición de Bosch
¡Ay infeliz del que nace árbitro! :: Notas
El campeonato de Cataluña ha querido despedirse con una jornada sensacional.
Los cuatro resultados de los cuatro partidos de anteayer han constituido cuatro sorpresas.
En el campo de la calle de Galileo los sansenses vencen a los campeones por un goal a cero.
En la carretera de Sarria el "potente" del Español empata a un goal, con el Tarrasa, completando así un día gloriosísimo para los albiazules, ya que en Buenos Aires el primer once batía a la selección norteña por un goal a cero, marcado por Olariaga.
En el terreno del Europa el desquiciado once titular vencía plenamente por tres a cero a los maravillosos rojos del Gracia.
Y, para completar el cuadro, el Martinenc solo se dejaba marcar tres tantos a cambio de uno ante las entusiastas y peligrosas huestes de Cabedo.
Ello ha dado por resultado que el Barcelona se quedara con los veinte puntos que ya tenía y que en el segundo puesto apareciesen empatados el Sabadell y el Sans con diez y seis puntos por barba.
En cambio, el Gracia, que estaba raspando dicho segundo lugar en calidad de único, se encuentra ahora con que ha de disputarse el cuarto nada menos que con otros tres concursantes, el Europa, el Tarrega y el Español.
El Martinenc queda en la zaga, con el puntuador sin estrenar, caso único, creo yo, en los anales del campeonato catalán.
De todos modos queda perfectamente en pie nuestra afirmación hecha en los ya lejanos albores da este torneo, o sea que la nivelación de fuerzas entre los equipos de nuestro grupo A era tan grande que se hacía punto menos que imposible predecir cómo quedarse la clasificación general.
Y tan niveladas se han presentado las fuerzas, que, en realidad, la verdadera clasificación ha quedado establecida así entre los ocho clubs concursantes: un campeón en primer término, dos subcampeones, cuatro terceros puestos y un octavo.
Los lugares cuatro, cinco, seis y siete han quedado vacantes y la diferencia de puntos entre el colista y el tercer clasificado es de quince: es decir, uno más que la mitad de la total. puntuación, que es de veintiocho, en tanto que el campeón no ha llegado a los tres cuartos de la puntuación máxima.
Casi es imposible una mayor nivelación de fuerzas.
La afición catalana puede estar orgullosa de todos sus clubs de primera categoría del grupo A.
EL PARTIDO SANS-BARCELONA
El Barcelona se presenta en el campo de la calle de Galileo con Walter.
Y como que en la calle de Galileo tenía que enfrentarse con un equipo tan decidido y entusiasta como el Sans, de juego rápido y desconcertante, la ausencia tal zaguero zurdo barcelonista era cosa muy grave y comprometedora.
Así debió de entenderlo Samitier, hombre de pupila líncica, y aun diríamos que condorica, y por esto, al salir al campo, se abstuvo de lanzar al aire el balón, en signo colosal, simbólico y gallardo, tal que si aquel cirial dibujo yiniese a ser la invisible asta donde flamear el gallardete de la victoria.
Dudo de ésta el gran Sami en la tarde de anteayer y por esto no quiso desprestigiar su simbólico saludo.
Salio, pues, al frente de sus huestes modestamente, con el balón en los pies, y se dirigió a la abandonada portería, chutando, y... la bola se estrello en el travesaño a falta de keeper.
¿Se quiere, después de tales hechos, esperar una victoria barcelonista?
Las cosas se presentaban mal, pero que muy mal, y así, hora y tres cuartos después, al once campeón salía, por vez primera en la historia del futbol catalán, batido del campo de la Unió Sportiva de Sans.
Y allá en el marcador, a los ojos de la multitud, la plancha amarilla ostentaba un cero redondo como la calabaza de junio destinada a los malos estudiantes, en tanto que la placa de las tres barras verdes mostraba, ufana y modesta, un uno, un uno glorioso que habrá de ser para el modesto equipo de Sans el más potente estimulo que le lance, en las venideras luchas, a la conquista de los más altos galardones deportivos...
ALGO SOBRE EL MATOM
Reseñar detalladamente este match sensacional es impropio de estas columnas, no destinadas a las crónicas de "sucesos".
Con decir que el árnixa en las boticas sansenses subió el domingo por la tarde una porción de enteros, queda hecha buena parte de la reseña del match.
Los masagistas de ambos equipos tenían, al terminar el encuentro, las muñeca adormecidas en fuerza de masagear. Y hasta había jugador - Calvet - que llevaba una suela de zapato morcada en el cuello.
No diremos que la culpa del juego duro, brusco, bronco, sucio, sea de esta de aquel equipo.
Ambos en ello pusieron, a conciencia, sus manos pecadoras.
El primero en ser declarado ko, fue Soligo, que tuvo que pasar al taller de reparaciones, de donde salió unos diez minutos después de haber ingresado.
Después fueron pasados por la piedra del sacrificio casi todos los restantes jugadores
- inclusive Planas y Surroca - siendo al batacazo más sensacional el que recibió Pedret al recoger un tiro lago de Sancho que Balasch le dejo, viéndose entonces acosado, con exceso de impetu y con el pie excesivamente levantado, por Samitier, cosa todas luces reprobable siempre, siempre, indefectiblemente, pero muchísimo mas en este encuentro en el que una seria lesión de Pedret exponía al equipo de selección barcelonesa a quedarse sin meta para los partidos de Praga y Zurich.
Hacia al final de la primera parte - más dura, en general, que la segunda - tuvo que ser expulsado del campo Torralba por haberle ministrado a Gularons un puntapié, un crochet de derecha 7 un swing con la zurda.
El suceso, así como la forma no "gentleman" que tuvo Torralbr al retirarse, motivaron una bronca de las que pudiéramos llamar oalderilleras, interviniendo los guardias para evitar que la cosa pasase a mayores.
Ya comprender a menos avisado de los leyentes que arbitrar en este maremagnum formidable era tarea más peliaguda que el lomo de un erizo.
Ello no obstante, el sabor Aramburo mantuvo muy bien, muy correcto, enérgico, sereno, imparcial, sin incurrir en errores de grueso calibre, haciendo un arbitraje que, merced a las circunstancias, hemos de calificar de magnífico.
Pero el público, cuyos nervios estaban en una tensión de prima de violín, la emprendió con él, pintándole a más y mayor, sobre todo al aparecer en el campo después del descanso, con lo que vino a demostrarnos que no siempre los arbitradores tienen la culpa de los sucesos que acontecen en los campos futboleros.
Aplaudamos sin reservas al señor Aramburo y lamentemos que el público no tenga la suficiente serenidad para respetar a los jueces en todo caso, y más en aquellos que, como el partido que nos ocupa, lo único digno de alabanza, sin reservas de especie alguna, fué la actitud del juzgador.
JUGADAS MENCIONABLES
A poco de comenzar el match Alcántara falla un tiro a placer a consecuencia de un enorme pase atrasado de Sagi, y otro, también a causa de una jugada de Sagi, que hace un cambio de juego magnifico.
Poco después Peidró pierde una clara ocasión de marcar con ocasión de un espléndido pase de la muerte hecho por Tonijuán.
A los trece minutos una escapada del ala zurda sansense, con caída de Planas, da margen a una centrada rasa que desvía Pedro y remata Tonijuán, logrando al goal válido, único de la tarde.
Dos minutos después una gran escapada de Rini probó a salida de Plattko, y el sansense, con oportunidad mayúscula, pase al balón por encima de Plattko y lo lleva a las mallas: pero Planas, oportunísimamente, logra despejar debajo mismo del larguero cuando el goal parecía inevitable.
Una nueva escapada de Rini queda anulada por inexplicable offeside de Peidró.
Piera lanza un freekiok magnifico y Sagi lo remata de bolea espléndidamente haciendo Pedret una parada punto menos que incomprensible, estupenda, enviando la pelota a corner, que lanza Sagi sin pena ni gloria.
Otros dos corners seguidos, lanzados también por Sagi, son despejados por el meta rayado, que está hecho un coloso.
Poco después son Oliveras y Montleón quienes hacen trabajar a Plattko.
La jugada de la tarde la inicia Samitier con un pase retrasado a Terralba para que se verifique un magnifico avance en triangulo - Piera-Arnau-Torralba - jugada que acabaen un estupendo chut de Sami que rebota en el lateral y va fuera.
Contestan a esto los de Sans con un fulminante avance Peidro-Rini que pone la piel de gallina a los barcelonistas.
Y la réplica consiste en una de las clásicas y emocionantes escapadas de Samitier, que, cerca del goal, se ve magistralmente tapado por Pedret, viéndose forzado a chutar sobre el meta y deteniendo este el tiro admirablemente. La ovación a ambos jugadores se debe escuchar en Pekín.
Escapada peligrosa de Rini, expulsión de Torralba y escapada de peligro de Sagi.
Piera, que ha pasado a la línea media en reemplazo del expulsado, chuta colosalmente, con una fuerza sin igual, y Pedret, a pesar de blocar perfectamente, queda grogy a consecuencia del batacazo de la pelota.
Magnifica centrada de Oliveras que Platko intercepta clasicamente, con presa en alto, y cabezazo de Sami, rozando el larguero, a un fantástico pase atrás de paracaidas tirado por Sagi.
Hacía el final de la parte primera Piera salva limpiamente una situación de alivio creada por los sensenses ante el marco do Plattko.
La segunda parte se inicia con un fuerte acoso del Sans, interviniendo Plattko para despejar el balón que, de un cabezazo a boca de jarro, lo envía Rini.
Escapada de Sami son batacazo de Perelló, que ha cortado el avance.
Avance Rini-Peidró con final intervención de Plattko.
Corner tirado por Piera, rematado por la cabeza de Sami y despejado finalmente por Pedret.
Instantes después sobreviene el acoso a Pedret de que ya di cuenta.
Rini lanza un corner contra el Barcelona sin consecuencias y después tira uno Piera contra el Sans, también inofensivo.
Planas intercepta con gran oportunidad un gran pase cruzado de Tonijuán.
Balasch salva una situación apurada enviando a corner, que ejecuta Piera regularmente, despejando Pedret.
Acoso barcelonista muy fuerte, y Sancho, después de tocar claramente el balón non el brazo derecho, chuta y marca un goal, que el árbitro anula con absoluta razón.
Plattko, en oportuna salida, intercepta un pase por alto de Montleon.
Escapada de Rini y enorme centro-chut, que Plattko desvía difícilmente a corner, - lánzandolo el propio Rini fuera.
Pase de Alcántara y chut oportuno de Sami un poco ladeado.
Brillante salida de Plattko que evita una fusilada de Peidró, consecuencia de un pase de Tonijuán,
Lio ante la meta barcelonista, sin consecuencias.
Corner que tira Sagi y despeja Tonijuán.
Faltan ocho minutos y Planas pasa a la delantera, cubriendo Arnau la zaga.
Tira un corner Oliveres y lo despeja Plattko, tirando a goal nuevamente Soligó y despejando bien y definitivamente el meta rojiazul.
Arnau, con gran serenidad, salva una peligrosa escapada de Rini, haciendo un pase largo a Plattko.
Y a poco fine el tiempo reglamentario.
LABOR DE LOS EQUIPOS
Ninguno de los equipos ha dado sensación, mas que en contadas ocasiones del saber jugar al futbol teóricamente.
Se ha derrochado entusiasmo por ambas partes y el juego ha sido duro siempre el correcto a ratos.
El Barcelona, sin Walter, he carecido del hombre decidido que en la zaga sepa librar, rápido y fuerte, los acosos sdversarioa
Por esto las situaciones de apuro ante Platto han sido muchas y sólo la falta de oportunismo de Peidró ha impedido que el Sans marcase más tantos.
Tampoco la linea media del campeón ha estado afortunada.
Bosch, reapareciendo, ha actuado bien en general, teniendo instantes de gran brillantez, que nos han recordado aquellos sus memorables partidos del pasado campeonato de España.
Sancho se ha mostrado en absoluto insuficiente para detener los avances de una línea rápida, y tal como sucedió en el anterior partido con el Gracia.
Lo mejor del Barcelona ha sido la delantera, sobre todo cuando Piera ha situado de medio y de delantero a la vez, ha cesado, por tanto, de hacer centradas sobre el goal, que sólo servían para que se luciese Pedret.
Hay que reconocer que la fortuna no acompaño en ningún momento Samitier ni a Alcántara a la hora de los remates. Y que, además, se han encontrado ambos con un señor porterazo que tapiaba la puerta en los instantes de apuro.
Con este mismo obstáculo han tropezado los delanteros del Sans, pero hay que reconocer que Peidró no estuvo oportuno en el aprovechamiento del juego que le dieron sus interiores.
Rini ha sido el mejor y más peligroso de los atacantes sansenses y Montleon el más trabajador.
En la linea media hay que aplaudir sobretodo la labor de Gularons marcando Samitier y anulándole casi por completo en el fuego por alto.
Soligó, a pesar de estar lesionado desde el principio del match, ha hecho un buen partido frente al ala formidable Sagi-Alcántara.
Calvet ha cumplido, como la zaga, sin hacer un papel extraordinario.
Como conjunto ninguno de los equipos nos ha convencido.
Y terminemos lamentando que el exceso de entusiasmo - siempre plausible - llevó a los jugadores a convertir un match en una batalla campal.
R. G. C.
Font: El diluvio
Autor: R. G. C.
Text:
PREMIO AL ENTUSIASMO
Los modestos albiverdes baten a los campeones rojiazules
La pupila de Samitier :: A matadegüella :: El árnica por las nubes Gran exhibición del sustituto de Zamora :: El fracaso de los rematadores :: La desaparición de Walter y la reaparición de Bosch
¡Ay infeliz del que nace árbitro! :: Notas
El campeonato de Cataluña ha querido despedirse con una jornada sensacional.
Los cuatro resultados de los cuatro partidos de anteayer han constituido cuatro sorpresas.
En el campo de la calle de Galileo los sansenses vencen a los campeones por un goal a cero.
En la carretera de Sarria el "potente" del Español empata a un goal, con el Tarrasa, completando así un día gloriosísimo para los albiazules, ya que en Buenos Aires el primer once batía a la selección norteña por un goal a cero, marcado por Olariaga.
En el terreno del Europa el desquiciado once titular vencía plenamente por tres a cero a los maravillosos rojos del Gracia.
Y, para completar el cuadro, el Martinenc solo se dejaba marcar tres tantos a cambio de uno ante las entusiastas y peligrosas huestes de Cabedo.
Ello ha dado por resultado que el Barcelona se quedara con los veinte puntos que ya tenía y que en el segundo puesto apareciesen empatados el Sabadell y el Sans con diez y seis puntos por barba.
En cambio, el Gracia, que estaba raspando dicho segundo lugar en calidad de único, se encuentra ahora con que ha de disputarse el cuarto nada menos que con otros tres concursantes, el Europa, el Tarrega y el Español.
El Martinenc queda en la zaga, con el puntuador sin estrenar, caso único, creo yo, en los anales del campeonato catalán.
De todos modos queda perfectamente en pie nuestra afirmación hecha en los ya lejanos albores da este torneo, o sea que la nivelación de fuerzas entre los equipos de nuestro grupo A era tan grande que se hacía punto menos que imposible predecir cómo quedarse la clasificación general.
Y tan niveladas se han presentado las fuerzas, que, en realidad, la verdadera clasificación ha quedado establecida así entre los ocho clubs concursantes: un campeón en primer término, dos subcampeones, cuatro terceros puestos y un octavo.
Los lugares cuatro, cinco, seis y siete han quedado vacantes y la diferencia de puntos entre el colista y el tercer clasificado es de quince: es decir, uno más que la mitad de la total. puntuación, que es de veintiocho, en tanto que el campeón no ha llegado a los tres cuartos de la puntuación máxima.
Casi es imposible una mayor nivelación de fuerzas.
La afición catalana puede estar orgullosa de todos sus clubs de primera categoría del grupo A.
EL PARTIDO SANS-BARCELONA
El Barcelona se presenta en el campo de la calle de Galileo con Walter.
Y como que en la calle de Galileo tenía que enfrentarse con un equipo tan decidido y entusiasta como el Sans, de juego rápido y desconcertante, la ausencia tal zaguero zurdo barcelonista era cosa muy grave y comprometedora.
Así debió de entenderlo Samitier, hombre de pupila líncica, y aun diríamos que condorica, y por esto, al salir al campo, se abstuvo de lanzar al aire el balón, en signo colosal, simbólico y gallardo, tal que si aquel cirial dibujo yiniese a ser la invisible asta donde flamear el gallardete de la victoria.
Dudo de ésta el gran Sami en la tarde de anteayer y por esto no quiso desprestigiar su simbólico saludo.
Salio, pues, al frente de sus huestes modestamente, con el balón en los pies, y se dirigió a la abandonada portería, chutando, y... la bola se estrello en el travesaño a falta de keeper.
¿Se quiere, después de tales hechos, esperar una victoria barcelonista?
Las cosas se presentaban mal, pero que muy mal, y así, hora y tres cuartos después, al once campeón salía, por vez primera en la historia del futbol catalán, batido del campo de la Unió Sportiva de Sans.
Y allá en el marcador, a los ojos de la multitud, la plancha amarilla ostentaba un cero redondo como la calabaza de junio destinada a los malos estudiantes, en tanto que la placa de las tres barras verdes mostraba, ufana y modesta, un uno, un uno glorioso que habrá de ser para el modesto equipo de Sans el más potente estimulo que le lance, en las venideras luchas, a la conquista de los más altos galardones deportivos...
ALGO SOBRE EL MATOM
Reseñar detalladamente este match sensacional es impropio de estas columnas, no destinadas a las crónicas de "sucesos".
Con decir que el árnixa en las boticas sansenses subió el domingo por la tarde una porción de enteros, queda hecha buena parte de la reseña del match.
Los masagistas de ambos equipos tenían, al terminar el encuentro, las muñeca adormecidas en fuerza de masagear. Y hasta había jugador - Calvet - que llevaba una suela de zapato morcada en el cuello.
No diremos que la culpa del juego duro, brusco, bronco, sucio, sea de esta de aquel equipo.
Ambos en ello pusieron, a conciencia, sus manos pecadoras.
El primero en ser declarado ko, fue Soligo, que tuvo que pasar al taller de reparaciones, de donde salió unos diez minutos después de haber ingresado.
Después fueron pasados por la piedra del sacrificio casi todos los restantes jugadores
- inclusive Planas y Surroca - siendo al batacazo más sensacional el que recibió Pedret al recoger un tiro lago de Sancho que Balasch le dejo, viéndose entonces acosado, con exceso de impetu y con el pie excesivamente levantado, por Samitier, cosa todas luces reprobable siempre, siempre, indefectiblemente, pero muchísimo mas en este encuentro en el que una seria lesión de Pedret exponía al equipo de selección barcelonesa a quedarse sin meta para los partidos de Praga y Zurich.
Hacia al final de la primera parte - más dura, en general, que la segunda - tuvo que ser expulsado del campo Torralba por haberle ministrado a Gularons un puntapié, un crochet de derecha 7 un swing con la zurda.
El suceso, así como la forma no "gentleman" que tuvo Torralbr al retirarse, motivaron una bronca de las que pudiéramos llamar oalderilleras, interviniendo los guardias para evitar que la cosa pasase a mayores.
Ya comprender a menos avisado de los leyentes que arbitrar en este maremagnum formidable era tarea más peliaguda que el lomo de un erizo.
Ello no obstante, el sabor Aramburo mantuvo muy bien, muy correcto, enérgico, sereno, imparcial, sin incurrir en errores de grueso calibre, haciendo un arbitraje que, merced a las circunstancias, hemos de calificar de magnífico.
Pero el público, cuyos nervios estaban en una tensión de prima de violín, la emprendió con él, pintándole a más y mayor, sobre todo al aparecer en el campo después del descanso, con lo que vino a demostrarnos que no siempre los arbitradores tienen la culpa de los sucesos que acontecen en los campos futboleros.
Aplaudamos sin reservas al señor Aramburo y lamentemos que el público no tenga la suficiente serenidad para respetar a los jueces en todo caso, y más en aquellos que, como el partido que nos ocupa, lo único digno de alabanza, sin reservas de especie alguna, fué la actitud del juzgador.
JUGADAS MENCIONABLES
A poco de comenzar el match Alcántara falla un tiro a placer a consecuencia de un enorme pase atrasado de Sagi, y otro, también a causa de una jugada de Sagi, que hace un cambio de juego magnifico.
Poco después Peidró pierde una clara ocasión de marcar con ocasión de un espléndido pase de la muerte hecho por Tonijuán.
A los trece minutos una escapada del ala zurda sansense, con caída de Planas, da margen a una centrada rasa que desvía Pedro y remata Tonijuán, logrando al goal válido, único de la tarde.
Dos minutos después una gran escapada de Rini probó a salida de Plattko, y el sansense, con oportunidad mayúscula, pase al balón por encima de Plattko y lo lleva a las mallas: pero Planas, oportunísimamente, logra despejar debajo mismo del larguero cuando el goal parecía inevitable.
Una nueva escapada de Rini queda anulada por inexplicable offeside de Peidró.
Piera lanza un freekiok magnifico y Sagi lo remata de bolea espléndidamente haciendo Pedret una parada punto menos que incomprensible, estupenda, enviando la pelota a corner, que lanza Sagi sin pena ni gloria.
Otros dos corners seguidos, lanzados también por Sagi, son despejados por el meta rayado, que está hecho un coloso.
Poco después son Oliveras y Montleón quienes hacen trabajar a Plattko.
La jugada de la tarde la inicia Samitier con un pase retrasado a Terralba para que se verifique un magnifico avance en triangulo - Piera-Arnau-Torralba - jugada que acabaen un estupendo chut de Sami que rebota en el lateral y va fuera.
Contestan a esto los de Sans con un fulminante avance Peidro-Rini que pone la piel de gallina a los barcelonistas.
Y la réplica consiste en una de las clásicas y emocionantes escapadas de Samitier, que, cerca del goal, se ve magistralmente tapado por Pedret, viéndose forzado a chutar sobre el meta y deteniendo este el tiro admirablemente. La ovación a ambos jugadores se debe escuchar en Pekín.
Escapada peligrosa de Rini, expulsión de Torralba y escapada de peligro de Sagi.
Piera, que ha pasado a la línea media en reemplazo del expulsado, chuta colosalmente, con una fuerza sin igual, y Pedret, a pesar de blocar perfectamente, queda grogy a consecuencia del batacazo de la pelota.
Magnifica centrada de Oliveras que Platko intercepta clasicamente, con presa en alto, y cabezazo de Sami, rozando el larguero, a un fantástico pase atrás de paracaidas tirado por Sagi.
Hacía el final de la parte primera Piera salva limpiamente una situación de alivio creada por los sensenses ante el marco do Plattko.
La segunda parte se inicia con un fuerte acoso del Sans, interviniendo Plattko para despejar el balón que, de un cabezazo a boca de jarro, lo envía Rini.
Escapada de Sami son batacazo de Perelló, que ha cortado el avance.
Avance Rini-Peidró con final intervención de Plattko.
Corner tirado por Piera, rematado por la cabeza de Sami y despejado finalmente por Pedret.
Instantes después sobreviene el acoso a Pedret de que ya di cuenta.
Rini lanza un corner contra el Barcelona sin consecuencias y después tira uno Piera contra el Sans, también inofensivo.
Planas intercepta con gran oportunidad un gran pase cruzado de Tonijuán.
Balasch salva una situación apurada enviando a corner, que ejecuta Piera regularmente, despejando Pedret.
Acoso barcelonista muy fuerte, y Sancho, después de tocar claramente el balón non el brazo derecho, chuta y marca un goal, que el árbitro anula con absoluta razón.
Plattko, en oportuna salida, intercepta un pase por alto de Montleon.
Escapada de Rini y enorme centro-chut, que Plattko desvía difícilmente a corner, - lánzandolo el propio Rini fuera.
Pase de Alcántara y chut oportuno de Sami un poco ladeado.
Brillante salida de Plattko que evita una fusilada de Peidró, consecuencia de un pase de Tonijuán,
Lio ante la meta barcelonista, sin consecuencias.
Corner que tira Sagi y despeja Tonijuán.
Faltan ocho minutos y Planas pasa a la delantera, cubriendo Arnau la zaga.
Tira un corner Oliveres y lo despeja Plattko, tirando a goal nuevamente Soligó y despejando bien y definitivamente el meta rojiazul.
Arnau, con gran serenidad, salva una peligrosa escapada de Rini, haciendo un pase largo a Plattko.
Y a poco fine el tiempo reglamentario.
LABOR DE LOS EQUIPOS
Ninguno de los equipos ha dado sensación, mas que en contadas ocasiones del saber jugar al futbol teóricamente.
Se ha derrochado entusiasmo por ambas partes y el juego ha sido duro siempre el correcto a ratos.
El Barcelona, sin Walter, he carecido del hombre decidido que en la zaga sepa librar, rápido y fuerte, los acosos sdversarioa
Por esto las situaciones de apuro ante Platto han sido muchas y sólo la falta de oportunismo de Peidró ha impedido que el Sans marcase más tantos.
Tampoco la linea media del campeón ha estado afortunada.
Bosch, reapareciendo, ha actuado bien en general, teniendo instantes de gran brillantez, que nos han recordado aquellos sus memorables partidos del pasado campeonato de España.
Sancho se ha mostrado en absoluto insuficiente para detener los avances de una línea rápida, y tal como sucedió en el anterior partido con el Gracia.
Lo mejor del Barcelona ha sido la delantera, sobre todo cuando Piera ha situado de medio y de delantero a la vez, ha cesado, por tanto, de hacer centradas sobre el goal, que sólo servían para que se luciese Pedret.
Hay que reconocer que la fortuna no acompaño en ningún momento Samitier ni a Alcántara a la hora de los remates. Y que, además, se han encontrado ambos con un señor porterazo que tapiaba la puerta en los instantes de apuro.
Con este mismo obstáculo han tropezado los delanteros del Sans, pero hay que reconocer que Peidró no estuvo oportuno en el aprovechamiento del juego que le dieron sus interiores.
Rini ha sido el mejor y más peligroso de los atacantes sansenses y Montleon el más trabajador.
En la linea media hay que aplaudir sobretodo la labor de Gularons marcando Samitier y anulándole casi por completo en el fuego por alto.
Soligó, a pesar de estar lesionado desde el principio del match, ha hecho un buen partido frente al ala formidable Sagi-Alcántara.
Calvet ha cumplido, como la zaga, sin hacer un papel extraordinario.
Como conjunto ninguno de los equipos nos ha convencido.
Y terminemos lamentando que el exceso de entusiasmo - siempre plausible - llevó a los jugadores a convertir un match en una batalla campal.
R. G. C.