El desquite del Barcelona

Data: 20/10/1924

Font: hemeroteca.mundodeportivo.com

Autor: Reti 

Text:
En Sans

El desquite del Barcelona

El once azul-grana tiene una excelente y serena exhibición de ataque que logra forzar la cerrada defensiva sansense.

El triunfo de la serenidad. He aquí como nos atreveríamos a resumir la visión del partido que ayer hubimos de presenciar en el campo de la U. S. Sans, y que presenciaron también un contingente numerosísimo de aficionados a los cuales, durante toda la semana, el posible resultado de este encuentro había mantenido en permanente ansiedad.
De la lucha ayer entablada entre barcelonistas y sanaenses salió vencedor el equipo más completo y el que mejores valores individuales contenía, pero venció sobre todo el equipo que desde el principio supo, sobreponiéndose al ambiente general de expectación que el match rodeaba, mantener la serenidad necesaria para que la superioridad técnica hablara debidamente.
Fué verdaderamente admirable ver cómo la línea delantera del Barcelona encontró ayer de actuaciones, sin que el entusiasmo puesto a connuevo la fórmula del secreto de sus brillantes contribución del deseo de victoria, turbara la difícil facilidad de su desenvolvimiento en un encuentro que, por su trascendencia, podía muy bien justificar el nerviosismo en los dos bandos.
Tanto es así, que si, espectadores accidentales del match ignorantes de su carácter, hubiéramos penetrado en el campo del Sans, cuando la lucha se encontraba ya en su pleno, no hubiéramos creído que de un match de Canepeonato se trataba.
Y de esa serenidad del once barcelonista que, repetimos, fué a nuestro juicio la nota dominante del encuentro y la verdadera determinante de la victoria, fueron los principales mantenedores Samitier y Piera, que desde el principio supieron dar al ataque barcelonista la nota de temple que había de permitir brillar y dar eficacia a la manifestación de su excepcional «virtuosismos y que al comunicarse al resto de los compañeros, nos hizo admirar durante muchos ratos el juego aquel característico de un Barcelona que parecía ya casi irresurgible.
La tenaz defensiva sansense pudo impedir durante largo tiempo que el científico ataque barcelonista pudiera encontrar el agujeros por donde la superioridad azul-grana hubiera do encontrar el camino definitivo de la victoria, pero, a la postre, hubo de sucumbir ante una ofensivsa brillante y persistente.
De la serenidad general que en el once azul grana imperó, sólo cabe exceptuar su medio centro Elías, que tuvo una tarde de gran actividad, muy superior a la desgraciadísima de su partido contra el Martinenc, en el que encontramos a faltar nuevamente las condiciones de distribución de juego y los recursos que el difícil puesto de eje del once campeón requiere.
Y conste que sentimos todas las simpatías para el entusiasta jugador azulgrana que, repetimos, tuvo, a pesar de todo, una de las mejores actuaciones que nos haya sido dable presenciar. Pero es indudable que en su juego, más que la ciencia impera la voluntad y el brío desordenado, y siendo estas características bien diferentes de las que presidieron ayer el juego general del Barcelona, no podíamos menos que hacer resaltar el contrasto.
El equipo de la U. S Sans jugó como cabía esperar, con mucho entusiasmo, pero técnicamente rindió bastante menos de lo que sus admiradores podían esperar y de lo que los resultados obtenidos durante el verano contra equipos como el Europa y el Español podían hacerse presumir.
Bien al contrario que en la del Barcelona, en la línea delantera de la U. S. Sans la serenidad no imperó en ningún momento y por ello pocas veces llego a ser peligrosa. Y cuando el peligro para Plattko existió fué consecuencia de jugadas personales de Rini y de Martínez sobre todo más que producto de una acción coherente de todo el ataque. La línea delantera, dentro de la relatividad que impone la categoría en que el grupo de la U. S. Sans figura, fué ayer inexistente en términos generales.
En cambio, el terceto defensivo rayó a gran altura y gracias a él el ataque del Barcelona no pudo
alcanzar resultado eficaz durante largo rato.
El portero sansense confirmó nuevamente su clase, parando múltiples y difíciles shoots y desarrollando, en todo el encuentro, una labor digna de todo encomio que no pueden desvirtuar los dos goals que le fueron marcados, ambos de dos cabezazos fulminantes, oportunísimos e imparables.
La U. S. Sans, en conjunto, se mostró el buen equipo capaz de constituir un serio peligro para cualquiera, pero su actuación de ayer no fué de las más sobresalientes que haya tenido en los últimos tiempos. Los deseos do salir triunfantes del que para ellos constituía el primer gran encuentro del Campeonato, al chocar contra un equipo que se presentaba mucho más sólido de lo que acaso, basándose en el precedente del domingo anterior, creyeron llevaron la nerviosidad a las filas de la U. S. Sans y el desenvolvimiento de su juego fué en general descosido.
Los dos partidos jugados contra el Gracia y contra el Barcelona permitirían suponer que al equipo de la U. S. Sans atraviesa un periodo de ligero decaimiento. Sin embargo, sería aventurado aceptarle, hasta después de algunos otros partidos, ya que contra los gracienses pudo tener influencia en la irregularidad de su actuación el exceso de confianza y contra el Barcelona existe el atenuante de la emoción que el partido debía causarlos... y del resurgimiento del equipo azul-grana con toda fuerza.
Los partidos venideros (en los cuales jugará Oliveras ya establecido y que constituye sin duda un notable refuerzo para delantera), deberán proporcionarnos más justos elementos do juicio respecto a la realidad de tal decaimiento.
En la reseña quedan detallados los goals, en este comentario preliminar queremos solo hacer constar la oportunidad y la limpieza con que fueron logrados. El primero muy bien preparado inicialmente con un centro «dibujados de Sagi-Barba, fue en cuanto al remate se refiere un nuevo alarde de esta agilidad inverosímil de Samitier que les permitió, en un salto prodigioso, rematar un balón que pasaba por sobre su cabeza altura que le hacía parecer inasequible.
Y el segundo, de Carulla, fue también logrado do un cabezazo fuerte, justísimo que hizo imposible la parada de Pedret. El saque de esquina que precedió al cabezazo fué también «dibujado. En suma, dos jugadas brillantes que, al dar la victoria al Barcelona fueron dignas de la actuación del mismo durante toda la tarde.
Ya hemos indicado en términos generales, cómo los equipos habían jugado en el aspecto colectivo.
Individualmente, por lo que al Barcelona se refiere, diremos que con ser la actuación de todos los delanteros notable, la de Piera, en la segunda parte fué de sobresaliente. Samitier, en general, llevó perfectamente la línea y fué de entre los serenos el de la serenidad máxima; Martí se entendió bien con él y fué un tercer elemento de valor para la combinación corta, precedida de hábiles desmarques en que se desarrolló por el centro el ataque azul-grana. Falló una magnífica ocasión de marcar, lanzando el shoot ligeramente desviado, pero esto no desmerece su excelente labor general, que ayer no sólo fué la de un jugador voluntarioso sino la de un jugador concienzudo y que supo adaptarse al juego vario y, a veces, algo complicado de su compañero del centro.
Viñals volvió ayer a ser el extremo veloz de fáciles escapadas y centros peligrosos y Sagi-Barba el reloj del equipo, sacó en la primera parte todo el provecho que podía del juego que se lo
envió, a pesar del mal estado del terreno en el rincón en que debía moverse y en la segunda parte fué, libre de tal dificultad, el gran extremo de costumbre y constituyó con Piera una ala formidable.
En la línea media ya hemos dicho lo que fue la actuación de Elías, Carulla y Torralba en las ala cubrieron bien generalmente la defensa, y coadyuvaron al ataque. Torralba volvió a ser el medio eficaz que el partido con el Martinenc había borrado y Carulla al reaparecer tuvo una buena tarde en general, que se vio premiada con el honor del goal consolidador de la victoria.
La defensa Planas-Walter fué digno complemento de la labor general de todo el equipo. El jugador alemán, aunque ayer abusó aún de dos kicks altos, va mejorando mucho en colocación y experiencia de juego. Ello unido a su decisión y brío en las entradas y a su kick potente, hacen actualmente de él un notable defensa. Plattko estuvo seguro y mostró gran vista al rechazar los shoots que hasta el llegaron, algunos de verdadero peligro. Sin embargo, aunque no tanto como en otros partidos, se entretuvo con exceso con el balón en dando a lugar que los delanteros contrarios le entrasen unas veces legalmente... y otras con evidente ilegalidad.
Como Plattko no es, cuando lo último se produce, hombre de nervios templados, una entrada ilegal de Rini produjo una respuesta tampoco muy legal del portero barcelonista y ello dió origen luego al incidente Planas-Rini, único que turbó por unos minutos el ambiente general de corrección con que el partido, a pesar de su viveza, iba desarrollándose.
Del Sans lo mejor, como hemos dicho, fué el terceto defensivo y en él sobresalió la gran labor del guardameta. Perelló, que reaparecía, tuvo una tarde excelente, de seguridad y decisión, siendo muy bien completado por Balasch.
En la línea media Gularons, de un modo especial en la primera parte, realizó una notable labor, procurando contrarrestare el juego del temible trío central adversario y sirviendo buenos pases a los delanteros sansenses. En la segunda decayó algo.
Soligó que, contra lo anunciado, pudo jugar, y Calvet, no lograron contrarrestar el juego de los extremos azul-granas y Sagi-Barba, solo pudo estar muchas veces desmarcado. La labor de los pobres sansenses fué en general discreta.
En cuanto a los delanteros ya hemos hablado de su inexistencias colectiva individualmente las escapadas de Rini y las jugadas de Martínez fueron lo único sobresaliente; Feliu y Peidro tuvieron un día poco afortunado.
El árbitro señor Villena, cumplió su misión con todo acierto a nuestro juicio, respirando su actuación imparcialidad por todos costados y meticulosidad para castigar las faltas, caso un poco excesiva en algunas manos que pudieron ser estimadas involuntarias. En el incidente Planas-Rini su intención fué expulsar a los dos jugadores, pero al lograr que éstos se dieran mutuas explicaciones y se reconciliaran con un apretón de manos, mantuvo a ambos en juego y su decisión recta en el sentido deportivo, evitó también que el incidente tomara vuelos mayores.
Y respecto a este incidente entre Planas y Rini, aún no pudiendo precisar de quién partió su iniciación, hemos de permitirnos recordar a Planas que en reciente investidura de capitán le impone una mayor serenidad que la demostrada en tal momento.
En suma, un buen desquite para el Barcelona, que no por el resultado, sino por la labor general del equipo, en todo el encuentro fué mayor de lo que las ausencias de Alcántara y Sancho podían hacer presumir. Si, como parece, la de Alcántara ha de prolongarse y probablemente llegar a definitiva, la formación ayer dada a la línea delantera y el juego por ella desarrollado puede mantener a alto nivel la valía de la misma, y, como por otra parto, la reaparición de Sancho, será seguramente un hecho desde el próximo domingo, el equipo recobra la potencia deseada por sus supporters, que trae del match de ayer, habrán recobrado también, seguramente, gran parte de sus optimismos.

Reti


LO QUE FUE EL PARTIDO

Como era previsto la concurrencia que asistió al campo de la U.S. Sans fué enorme, llenándose el campo a rebosar y quedando numeroso público sin poder entrar.
F. C. BARCELONA: Plattko - Planas, Walter - Torralba, Elias, Carulla - Viñals, Marti, Samitier, Piera y Sagi Barba.
U.S. DE SANS: Pedret - Perelló, Balasch - Soligó, Gularons, Calvet - Rini, Peidró, Feliu, Martínez y Riba.
A las tres, veinte minutos de la tarde, hace el saque el Sans, apoderándose seguidamente del balón el Barcelona que inicia su primera escapada que fine en offside de Viñals.
El juego es rápido sin que en los primeros momeros momentos alcance gran brillantez. Uno y otro equipo ponen a contribución del juego una gran dosis de entusiasmo, si bien en las filas azul-granas se nota mayor serenidad.
Samitier y Martí nos deparan un momento de todo interés al efectuar un avance en magnifica combinación a base de pases adelantados que fine con shoot de Sami sin consecuencias. El juego es movidisimo. Calvet contusionado abandona el terreno de juego por unos momentos.
La delantera sansense, por obra, de un soberbio sprint de Rini, burla la vigilancia de los medios barcelonistas y se interna en terreno adversario. Cerca del límite del campo, Rini, dirige un formidable tiro cruzado que obliga a Plattko a blocar el balón con dificultad.
Domina el once azul-grana y los medios alas cooperan al ataque, y Pedret nos muestra su valía deteniendo con gran justeza un fuerte shoot sesgado de Torralba ganándose el portero sansense una fuerte ovación.
Las escapadas del Barcelona son cada vez más frecuentes como así las intervenciones de Pedret. Este jugador se ve obligado a conceder el primer corner de la tarde al salvar un intencionado tiro de Piera, recogiendo un buen pase de Sagi.
Para evitar un momento de peligro, provocado por un avance sansense, Planas incurre en foul que tirado directo por Gularons, da ocasión a que Plattko se luzca blocando el balón con seguridad.
Nuevamente Pedret comete corner en una situación comprometida evitando así cosa peor. Es tirado sin consecuencias... superiores, pues que nuevamente, después de varios remates, es rechazado a corner por el propio guardameta sansense. Hecho de nuevo el saque, tampoco obtiene resultado alguno.
la linea defensiva en que tanto Planas como Walter y Perelló como Balasch, actúan con una seguridad pasmosa y digna del nombre de que gozan.
Después de algunas jugadas sin importancia alguna, Pedret comete un nuevo corner, al rechazar un cen tro de Viñals.
Aplaudimos aun algunas buenas paradas de Pedret y con un ligero decrecimiento del tren de juego llégase al final de la primera parte, en que el "Bar. colona" ha hecho un juego sereno, superior al de sus adversarios especialmente en el ataque, pero algo falto de empaje.
Al reanudarse el match, apreciase un acrecimiento del empaje del avance barcelonista sin merma de su brillantez ni de su precisión. Sagi-Barba ahora terreno seco y muy bien servido por Piera, echa numerosos centros de todo peligro. La inteligencia general de la delantera barcelonista es notable y viene secundada con acierto por los medios alas e, incluso, por Elías que suple con extraordinario entusiasmo la falta de precisión de su juego.
En cambio observamos en los medios del Sans el nacimiento de una fatiga que, poco a poco va acentuándose y cuyas consecuencias favorecen al ataque barcelonista.
En un avance barcelonista, termina la jugada con un soberana tiro de Piera que milagrosamente salva Pedret, lanzándone al suelo.
Por unos momentos vemos la puerta de Pedret en inminente peligro; los medios sansenses, en exceso retrasados, no hacen más que facilitar el ataque del Barcelona.
Y llegamos al momento del primer goal de la tarde. Completamente desmarcado, Sagi, lanza un primoroso centro. El balón va a chocar contra el ángulo del poste. Pedret se lanza para detener la pelota pero Samitier, más rápido todavía, entra de cabeza y logra goal que promueve una gran ovación justa por la precisión del centro y la oportunidad y valentia del remate.
Pero los sansenses no decaen y hacen desesperados esfuerzos para lograr el empate. Rini i Peidró se cambían el lugar pero tampoco esta decisión da resultado alguno. Todos sus avances son anulados Walter que está jugando enormemente.
Pedret ejecuta una jugad dificilisima a un balón procedente de un cabezazo de Balasch que al intentar rechazar un centro de Sagi, lo hace con tan mala fortuna que tira el balón a su marco. La jugada Pedret, por lo rápida, ha sido merecedora de mayor aplauso del que se le ha dedicado ha salvado un tanto segurisimo, convirtiendo la jugada en corner que se tira y no produce resultado alguno.
Aunque dominado, el "Sans" a medida que se acerca el final del partido se esfuerza en ver de lograr el empate.
Rini, veloz, se cuela hacia el terreno adversario cuando parecía iba a tirar a goal, entra Platko inutilizando los deseos del veloz equipier. Uno y otro caen al suelo permaneciendo en él, un rato el delantero sansense. Al acudir los demás jugadores a auxiliarlo, se promueve una discusión en la que las muestras que luego presenta la cara de Rini habido algo más que discusiones verbales.
Se suspende, a consecuencia de ello, el juego buen rato. El árbitro parece que va a expulsar a Rini y Planas, pero en definitiva (y no es su solueción menos adecuada) hace que se den un apretón de manos y ambos continúan el juego.
Al reanudarse el juego vuelve el "Barcelona" al ataque y volvemos a ver un juego animadisimo.
El "Barcelona" acentúa aun más su presión sobre la puerta "sansense". Perelló involuntariamente lanza el balón a corner. Piera lo tira y lo hace tal precisión que Carulla, tras un magnifico salto de este recoge el balón y de un fuerte cabezazo, logra el segundo y último goal de la tarde. El contento de los jugadores llega a su límite y constituye un poderoso acicate para hacer perseverar en el ataque. Pero ya este no da ningún resultado más pues al poco rato de reanudarse el match fine cuando el dominio Barcelona iba siendo ya absoluto.