LA ACERTADA LABOR DE LA DEFENSA ROJA Y LA DEFICIENTE DEL COLEGIADO MARINE, PRIVARON AL SANS DE UN POSIBLE TRIUNFO
Data: 19/10/1931
Font: hemeroteca.mundodeportivo.com
Autor: M. T. K.
Text:
EN SANS
U. S de Sans, 0-Santboi, 0
LA ACERTADA LABOR DE LA DEFENSA ROJA Y LA DEFICIENTE DEL COLEGIADO MARINE, PRIVARON AL SANS DE UN POSIBLE TRIUNFO
El equipo blanquiverde avanzó en el match de ayer tan sólo un pie. Un empate equivale a un punto y eso fué lo que logró salvar tras de noventa minutos de enconada lucha. Pero no fué del Sans toda la culpa de que así sucediese; una parte corresponde a su línea delantera y la otra a la defensa contraria y al colegiado señor Mariné por partes iguales.
Véase sino que el cuadro blanquiverde dominó durante todo el encuentro logrando en numerosas ocasiones estacionarse en la meta defendida por Montserrat y a pesar de tejer y destejer en la mayoría de ocasiones con singular destreza y llegar incluso a entusiasmar a sus partidarios, porque éstos veían ya el ansiado goal, hubo de conformarse con un discreto empate que viene indiscutiblemente a comprometer su actual clasificación, malísima por cierto, si queremos darnos cuenta de lo que el Sans ha sido y se esperaba que fuese en la presente temporada.
Técnicamente, partido fué una cosa muy mediana. Expectacularmente fué algo mejor; se jugó rápido del principio al fin, se puso un gran empeño en el triunfo, y se puso bastante cerebro en la ejecución de las jugadas logrando de este modo hacer que el público siguiera atento en todo momento, con lo que en el terreno sucedía. Pero no pasó de aquí. No podemos en modo alguno emplear otra clase de adjetivos para con estos voluntariosos muchachos. porque en realidad no hicieron más que poner eso: entusiasmo. De todos modos, el público y nosotros también, hemos de agradecérselo, porque consideramos que ya es bastante. En muchas ocasiones, nos hemos condolido de no haber hallado ni entusiasmo siquiera, no en la actuación de estos onces precisamente, sino en la de otros cuadros de igual o superior categoría.
Al empezar estas líneas hemos mencionado "tres culpas" y vamos ahora con ellas. La mitad desde luego, se la damos a la propia delantera blanquiverde, porque no llegó a entenderse lo suficiente cuando la ocasión se presentó propicia. La mitad del resto la tiene, a nuestro juicio, la defensa santboyana v su guardameta, porque supieron salvar innumerables peligros tirándose con arrojo y oportunidad cuando fué preciso, y el resto de la segunda mitad, el colegiado señor Mariné, quien se empeñó en no ver algunas faltas que indudablemente perjudicaron al equipo local, sin atrevernos a afirmar que estas faltas en el caso de ser penalizadas hubieran podido influir en el resultado material como sin duda alguna influyeron en la moral del team sansense.
Y como consecuencia directa de esta actuación desgraciadísima del señor Mariné, no pudo impedirse que al salir del terreno de juego, en dirección al vestuario, fuese agredido a mamporro limpio por un exaltado de los que desgraciadamente no faltan en los terrenos de fútbol.
La alineación de los equipos se hizo de la siguiente manera:
Sans: Domenech, Villacampa, Torredeflot, Soligó, Vela, Bartolí, Gironés, Saura, Llovera, Martí y Calsina.
Santboi: Montserrat, Lacal, Mir, Cifuentes, Puig, Barrachina, Sospedra, Riba, Elías, Castells y Vandellós.
Asistió numeroso público y desde luego evidenció con la misma fuerza su benevolencia en las buenas jugadas, como su disgusto en los errores del árbitro. M. T. K
Font: hemeroteca.mundodeportivo.com
Autor: M. T. K.
Text:
EN SANS
U. S de Sans, 0-Santboi, 0
LA ACERTADA LABOR DE LA DEFENSA ROJA Y LA DEFICIENTE DEL COLEGIADO MARINE, PRIVARON AL SANS DE UN POSIBLE TRIUNFO
El equipo blanquiverde avanzó en el match de ayer tan sólo un pie. Un empate equivale a un punto y eso fué lo que logró salvar tras de noventa minutos de enconada lucha. Pero no fué del Sans toda la culpa de que así sucediese; una parte corresponde a su línea delantera y la otra a la defensa contraria y al colegiado señor Mariné por partes iguales.
Véase sino que el cuadro blanquiverde dominó durante todo el encuentro logrando en numerosas ocasiones estacionarse en la meta defendida por Montserrat y a pesar de tejer y destejer en la mayoría de ocasiones con singular destreza y llegar incluso a entusiasmar a sus partidarios, porque éstos veían ya el ansiado goal, hubo de conformarse con un discreto empate que viene indiscutiblemente a comprometer su actual clasificación, malísima por cierto, si queremos darnos cuenta de lo que el Sans ha sido y se esperaba que fuese en la presente temporada.
Técnicamente, partido fué una cosa muy mediana. Expectacularmente fué algo mejor; se jugó rápido del principio al fin, se puso un gran empeño en el triunfo, y se puso bastante cerebro en la ejecución de las jugadas logrando de este modo hacer que el público siguiera atento en todo momento, con lo que en el terreno sucedía. Pero no pasó de aquí. No podemos en modo alguno emplear otra clase de adjetivos para con estos voluntariosos muchachos. porque en realidad no hicieron más que poner eso: entusiasmo. De todos modos, el público y nosotros también, hemos de agradecérselo, porque consideramos que ya es bastante. En muchas ocasiones, nos hemos condolido de no haber hallado ni entusiasmo siquiera, no en la actuación de estos onces precisamente, sino en la de otros cuadros de igual o superior categoría.
Al empezar estas líneas hemos mencionado "tres culpas" y vamos ahora con ellas. La mitad desde luego, se la damos a la propia delantera blanquiverde, porque no llegó a entenderse lo suficiente cuando la ocasión se presentó propicia. La mitad del resto la tiene, a nuestro juicio, la defensa santboyana v su guardameta, porque supieron salvar innumerables peligros tirándose con arrojo y oportunidad cuando fué preciso, y el resto de la segunda mitad, el colegiado señor Mariné, quien se empeñó en no ver algunas faltas que indudablemente perjudicaron al equipo local, sin atrevernos a afirmar que estas faltas en el caso de ser penalizadas hubieran podido influir en el resultado material como sin duda alguna influyeron en la moral del team sansense.
Y como consecuencia directa de esta actuación desgraciadísima del señor Mariné, no pudo impedirse que al salir del terreno de juego, en dirección al vestuario, fuese agredido a mamporro limpio por un exaltado de los que desgraciadamente no faltan en los terrenos de fútbol.
La alineación de los equipos se hizo de la siguiente manera:
Sans: Domenech, Villacampa, Torredeflot, Soligó, Vela, Bartolí, Gironés, Saura, Llovera, Martí y Calsina.
Santboi: Montserrat, Lacal, Mir, Cifuentes, Puig, Barrachina, Sospedra, Riba, Elías, Castells y Vandellós.
Asistió numeroso público y desde luego evidenció con la misma fuerza su benevolencia en las buenas jugadas, como su disgusto en los errores del árbitro. M. T. K